miércoles, 16 de septiembre de 2015

"El sistema agroalimentario globalizado" de Manuel Delgado Cabeza

   El documento explica la transformación del sistema alimentario dentro del contexto de globalización, analizando tanto los fenómenos que ocurren dentro del mismo como su desarrollo hacia la crisis alimentaria en un periodo específico, el del "régimen alimentario corporativo" que comienza en los 80 (a la par que la globalización). Los cambios acaecidos en este tiempo han implicado, citando al texto "un cambio cualitativo en los modos de organización" en el que los "imperios corporativos" se han apropiado del control de la producción de alimentos a nivel planetario así como de nuestro consumo.


El autor

   Para su análisis el autor se vale de ejemplos detallados (como el caso de la importación de arroz norteamericano en Haití o el hecho de que una empresa como Walt Mart genere ingresos mayores al del PIB de 20 países -!-) que revelan el dominio que tienen estos gigantes sobre los eslabones más altos de la escala productiva, lo que los posiciona para absorber la mayor cantidad de valor añadido en la misma de modo que se continúe el círculo interminable: estas empresas adquiriendo poder político que les permite determinar los precios del mercado, que al verse, a su vez, reducidos, inclinan la balanza de consumo a su favor, lo que aumenta el poder de los imperios hasta el punto en el que las decisiones de producción -es decir, de su producción (lugar, calidad, condiciones, distribución del trabajo, sueldos)- estén todas a su cargo.

   Ahora bien, en un estudio que da vértigo (debido a la revelada alevosía del proceso), el autor explica los elementos que han hecho posible esta cadena de financiarización de lo alimentario en favor de imperios corporativos. Intentaré resumirlos.

1. De cómo se financian estas empresas. Hemos hablado en clase del mecanismo de deudas no exigibles que permite a las corporaciones expandirse sin necesidad de inversión propia, sino que es el comprador el que les financia, al comprar sus acciones quitándoles así todas las restricciones monetarias para apropiarse de los recursos materiales con este capital inventado[1].

2. Sobre cómo se legislan estas empresas. La Organización Mundial del Comercio se encarga de reforzar esta estructura avalándose de la idea de que las políticas implementadas apuntan a la optimización de recursos. Para esto -para que la mano mágica del mercado regule el aprovisionamiento más eficaz de recursos- es necesario eliminar todas las restricciones de intercambio (es decir, reducir por un lado dificultades para las exportaciones masivas -aranceles- y por otro descuidar las de producción local).

3. Dependencia del mercado para seguridad alimentaria. El desmantelamiento de organismos que hacen posible la autoabastecimiento alimentario pone a los países en un estado de dependencia del mercado para garantizar el abastecimiento alimentario. Según la FAO, seguridad alimentaria es el acceso físico y económico a alimentos inocuos y nutritivos  que satisfagan las necesidades alimentarias de toda la población. Ante esto notamos que
; esto es igual a un peligrosísimo riesgo de inseguridad, puesto que un país que depende de otro para satisfacer su necesidad más elemental -la alimentación- está poniendo toda su autonomía (económica, social, laboral) en manos de este otro que determinará sus decisiones en absoluto en pos de la seguridad de los elementos alimentarios sino del mantenimiento del estatus quo de la estructura de producción.

4. El papel de las nuevas tecnologías. Además de las ya de por sí malévolas estrategias del marketing, la tecnología y la ciencia son utilizadas en esta manipulación del capital biótico a través de los transgénicos; amén de la apropiación vía biopiratería que es posible gracias a las modificaciones genéticas que pueden hacerse de un producto natural, apropiándose así de éste

5. Dominio del tiempo y espacio. Es verdad que desde Polanyi viene denunciándose la transformación de la tierra en mercancía, pero quizá ni siquiera él mismo habría podido predecir el uso de ésta como un elemento más en el entramado estratégico de manipulación de recursos. Disponer de la tierra arbitrariamente en favor de la "eficiencia" es el epítome de la mercantilización de todo -y de paso de nuestra subordinación entera a ésta.


Todos estos elementos nos llevan a una situación difícilmente ignorable: la crisis alimentaria.

1. Malnutrición de países del sur
2. Envenenamiento de países del norte
3. La propia crisis ecológica



 [ aquí se perdió la info y se me quitaron las ganas de seguir]



[1] Utilizo este término, aunque improvisado, a falta de otro que ilustre mejor la calidad ficticia del dinero generado por venta de acciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario