miércoles, 16 de septiembre de 2015

Danza expresionista alemana. Estudio del trabajo coreográfico de Pina Bausch y Mary Wigman


El presente trabajo tiene como objetivo realizar un estudio comparativo de dos
disciplinas dentro del movimiento expresionista, intentando encontrar así, mediante la observación y análisis de la pintura y la danza, el espíritu o cualidades esenciales de esta tendencia.

Puesto que considero que el aspecto social es de importancia fundamental para
comprender esta corriente, me centraré en un contexto particular, Alemania. Intentaré representar el ánimo de este país a través de la pintura en torno a los años de guerra y en contrapunto con la danza a través de las dos coreógrafas que, a mi ver, tuvieron mayor repercusión en la danza hasta nuestros días y por lo tanto en el paradigma artístico de su cultura.

La presente investigación pretende, pues, llevarnos a conocer las formas de vida y creación de diferentes autores, siempre recordando lo influenciados que estaban por sus circunstancias históricas y sociales. Sólo me queda desear que el documento sea un conducto hacia esos sentimientos que los creadores que veremos quisieron transmitir.


Expresionismo

Introducción


El expresionismo no es un movimiento fácilmente definible, es más, será más correcto entenderlo en tanto que una forma de ver el mundo (Weltanschaunng), de modo que de aquí en adelante utilizaremos el término de esta manera; podemos, también decir que se trata de un recurso del hombre aturdido del siglo XX para encontrar su reubicación en un ambiente caótico; en los preludios de guerra y en medio de la miseria de ésta, la vuelta al interior y la distorsión de la realidad se convierten en una vía para o entender el estrépito exterior.

Sabemos que se desarrolla principalmente en Alemania, entre los años 1905 (formación del grupo Die Brücke) y 1933 (ascenso de los nazis al poder), sin embargo, puesto que vamos a estudiar sobre todo la influencia ideológica que ejerció en otros artistas alemanes, no desecharemos la figura de Edvard Munch (Noruega) y de Klimt y Schiele (Austria) para entender la esencia de esta forma opositora a la vida del régimen de Guillermo II.


El lenguaje expresionista, pues, difumina la distinción entre objeto y sujeto, es correcto decir, la distorsiona: el ánimo del sujeto se verá expresado en la deformación del objeto. Para Else Ritcher (Willet, 1970) el expresionismo es la “Reproducción de sensaciones provocados en nosotros por impresiones externas, sin considerar las propiedades reales de las cosas.” -Esta definición propuesta para la literatura puede aplicarse para las artes en general, continúa diciendo- “No se ocupa objetivamente del presente ni su medio de reproducción, ofrece el sentir subjetivo de las cosas e ideas”. Las manifestaciones expresionistas, por tanto, son carentes de ética y hasta cierto punto subversivas, dada su oposición al resto las tendencias vistas hasta entonces.



Contexto social del expresionismo


Son los inicios del siglo XX y el materialismo capitalista llega aparejado con el quiebre de valores. La estabilidad económica e intelectual del siglo XIX terminó junto con éste. A partir de 1900 comienzan a gestarse una sensación de desequilibrio vertiginoso en el hombre moderno. La crisis es palpable, los progresos de la ciencia, máquina y técnica son más veloces que el control que podemos tener sobre ellos; la dicotomía entre burguesía y miseria es señalada por diversos filósofos de la época como una  demostración de la decadencia del espíritu; psicológicamente, el contraste entre los ideales de la época y la realidad que se manifiesta es cada vez más crudo; el orgullo delirante alemán, enardecido con el desarrollo tecnológico y político, se inclina hacia una especie de credo europeo nacionalista que idealiza la futura república capaz de abarcar la tierra, Alemania está toda deseosa de una guerra venidera que venga a purificar el mundo.

En medio de este apabullante crecimiento comienzan a asentarse las redes para la generación de Mass Mensch, y en oposición surgen nuevos conceptos que reformarán la ideología reinante. El psicoanálisis de Freud abre la puerta a la exploración del inconsciente, en filosofía Nietzsche incita a la juventud a buscar otro ideal de hombre, el relativismo es traído a la luz por Einstein, olor a guerra...

Ante el caos metropolitano, el artista expresionista busca -observa- en lo áspero (fábricas, prostitutas, hambre, miseria) un reflejo de su constitución interna, pero también aspira a la construcción de los temas más elevados: Dios, alma, mundo, El Hombre, El Espíritu, la naturaleza, lo social. No queda tiempo para detenerse en cuestiones banales, la expresión está en búsqueda de las grandes verdades del espíritu humano y hacia allá se dirige a través de los caracteres angulosos y desesperados de sus pinturas. Se sentencia la industrialización con un sentimiento revolucionario que buscará en el arte la reivindicación del individuo a condición  de la búsqueda de sí mismo.

                                                             Anónimo "Capitalismo", 1918

Estas pinturas son un ejemplo de la rebelión del artista ante su entorno social. Se critica la alienación, la pérdida de la fe en la antigua espiritualidad



Beckman "El descendimiento de la cruz"                            
 Schmidt  Rottluff - Ist euch nicht Kristus erschienen, 1918             






Jansen "Ocho en punto", 1920


El expresionista emprende su eterno retorno, la búsqueda de su propia expresión a partir de dentro, a través del símbolo emocional. Tanto en la plástica como en la danza se desecha el uso de la forma estilizada en pos de la búsqueda del contenido. Será un proceso complejo en el que el artista recurrirá (como diría Przybyszewsky*, visiones con los ojos de a mente, al margen de lo consciente") a la deformación de la imagen, de la distorsión, de la abstracción; veremos como tanto en la danza y en la pintura se recurre a símbolos primitivistas que distan de ser agradables, o fáciles de apreciar.



Precedentes filosóficos del Expresionismo


Para 1890 existieron fenómenos filosóficos que gestarían el expresionismo. Autores como Schopenhauer y Nietzsche ponen en evidencia el materialismo que la revolución industrial comenzó a gestar. Veamos lo que apuntan.

Arthur Schopenhauer desintegra el dogma de  que la razón es la esencia profunda humana abriéndo la puerta a la idea de que la voluntad es la fuerza principal de la cual se derivan todos los fenómenos objetivos del mundo que conocemos. Dentro de esta idea la razón se doblega a la voluntad y la voluntad es independiente e irracional. Este es un punto crítico para el pensamiento occidental sobre el cual la ciencia había hallado un nicho y auge apenas décadas dejando tras de sí un caudal de conocimiento y sensación de dominio, sin embargo este discurso (fundamentado sobre todo el hechos materiales en los que la producción, el poder y la realidad imperan sobre la "lógica del mundo") mina la solidez de la razón y, con ella la del pensamiento de la época.

Por su parte, Friedrich Nietzsche marca a la época contemporánea como su sentencia de la “muerte de Dios” en la mente moderna. También la fe religiosa solía ser otra fuente de seguridad sobre la vida social, pero esta desaparece del horizonte conforme la irracionalidad prima sobre la idea estable de un Dios Todo-Creador. Sin embargo Nietzsche considera este fenómeno parte de la evolución espiritual y propone incluso la siguiente condición humana, el superhombre. Coloca, al igual que Schopenhauer, en un lugar primordial a la voluntad en tanto su efecto directo en la realidad. (Olleta, 2010).

Las nuevas formas de pensar se hacen patentes. Van surgiendo tendencias de simpatía al anarquismo, antimilitarismo, utopía, hermandad internacional, etc. al mismo tiempo que los patrones de injusticia social con cada vez más repudiados, esto se manifiesta con los movimientos feministas y raciales. Se apoya la libertad de ideología, de espíritu, de sexo. El nuevo siglo llega como una era de pasiones.


Características del expresionismo

El término alemán "ausdrücken", además de expresar, quiere decir exprimir, retorcer. Ésta es una cualidad que veremos muchas veces exacerbada en el arte expresionista, un claro reflejo de la inestabilidad que se deja sentir en las primeras décadas del siglo.


                                           Schiele "Autorretrato con brazo torcido sobre la cabeza", 1910


Podemos destacar dos tendencias en este movimiento.
Una de ellas estaría caracterizada por la oposición y crítica[1] al sistema político y social, surge así surge la Neue Sachlichkeit, una nueva objetividad, forma de apreciar/criticar la realidad, también los miembros de Die Brücke son claro ejemplo de esto en las apreciaciones que brindan sobre la ciudad.
Kirchner, principal expositor de la primera fase del expresionismo destaca por ilustrar la ciudad en ángulos agudos, colores ácidos y una notoria cualidad de luto y vacío en sus personajes y éste está notoriamente influido por la tonalidad melancólica y sombría de su admirado predecesor Edvard Munch.

                                             Munch "Melancolía", 1896



Heckel, "Dos hombres a la mesa", 1912



Por su parte, la fase espiritual (que ejemplificaremos con Kandinsky y Marc) es la idealización por encontrar la abstracción/expresión pura. Kandinsky busca en la relación de colores con la música un armonía en abstracto, Marc y Macke elevan sus pinturas abstractas como la cristalería de un vitral de catedral al cielo, en danza, Laban reúne a bailarines en estancias Monte Veritas donde explora la verdadera expresión de un cuerpo llevado a su óptimo.


Además de la abstracción, la empatía cobra un lugar fuerte en el momento de encontrar un reflejo fidedigno de la realidad. El artista expresionista buscará en los síntomas de sus personajes, en su hambre, su angustia, su recelo para poder expresarlo fidedignamente: Abstraktion und Einfühlung, "Abstraer y empatizar". En danza, el bailarín se esforzará por encontrar nuevas sensaciones en el cuerpo, a través de otros estímulos, de imágenes, de sensaciones, de ideas.

Klimnt "Filosofía", 1897


En Viena, Kokoscha, produce retratos distorsionados, en una exageración exuberante de los rasgos buscaba los matices que atinen a la esencia del alma según las cualidades psicológicas de las personas que pintaba. Recalcamos en esta tendencia puesto que un discurso dramatúrgico es concentrarse en buscar ese centro de la esencia humana "el lugar donde el hombre estalle ante el hombre” (Willet, 1970, p. 118). Así, el proceso del creador se centrará en la psique de sus personajes para investigar sobre preguntas que, cree, lo llevarán a una liberación intelectual, veremos estas preguntas llevadas a la práctica en los métodos de Pina Bausch y que son el factor determinante para que su danza sea llamada Tanztheater (una mezcla con el teatro).

Encontramos en “GAS”, obras teatral de Georg Kaiser escrita en 1919; un ejemplo de esta búsqueda, de esta propuesta de reformulación filosófica en la literatura y en el arte dramático:  “Dime: ¿dónde está el Hombre? ¿Cuándo aparecerá –y se llamará por su propio nombre: -Hombre? ¿Cuándo se agarrará a sí mismo –y sacudirá su conocimiento de las ramas? ¿Cuándo dominará el curso  –terminará la nueva Creación, que él estropeó: Hombre?!” (Citado en Willet, 1970, p. 123)

Por su parte, Kandisnsy escribirá (para la pintura pero aplicable a todas las artes plásticas y escénicas) "Sobre lo Espiritual del Arte". Se trata de un tratado que pretende enmarcar las leyes de la armonía en la abstracción. También Marc trabajará con temas de redención y elevación, trabajando a partir de imágenes animales de fuerte colorido.




Expresionismo en pintura
DIE BRÜCKE





"Yo no voy por donde vosotros vais,
despreciadores del cuerpo. Para mí
no sois el puente que conduce al súper hombre"
F. Nietzsche.



Eran cuatro artistas sajones[2], de no más de 25 años, estudiaban arquitectura en Dresde para satisfacer los deseos de sus padres y percibir manutención, sin embargo, sus actitudes los unen para formar un grupo, una nueva tendencia en común, una hermandad de producción pictórica que quería “liberar a su trabajo de las formas establecidas anteriormente”[3].

Al principio se reunían en casa de Kirchner, la cabeza del grupo, posteriormente Heckel, la fuerza administrativa encontraría un local (así como diversos contactos, galerías y patrocinadores para exposiciones.

Este grupo de creadores inconformes marcaría el punto de partida del expresionismo alemán. Su principal característica fue la tensión y violencia emocional captada a través del color intenso y formas africanizadas de la imagen, su influencias se encuentran en la desfiguración de Munch y los retratos arrabaleros de Toulouse-Lautrec.

Quizás fue su deseo de reformar el arte alemán lo que les hizo elegir "El Puente" como nombre. Este símbolo, estandarte de trascendencia, superación, de paso, nos hace pensar que se abandona esta realidad superflua insípida para enfilarse a un nuevo ideal.

La producción de Dio Brücke oscila entre el ritmo agitado de la metrópoli (instalados en Dresde, luego en Berlín, dormían de día, pintaban de noche en un estudio minúsculo pero cargado con un sabor tribal exuberante, y se impregnaban de lo cotidiano, del olor a prostitutas y los ruidos callejeros) y el del hombre en el medio más natural (encontramos las imágenes más libres en las escenas de campo, reflejo de los veraneos en Moritzburg[4]). Se proponen y fundan una nueva forma de vivir y de observar el mundo. Estos ideales, sin embargo se verán derrumbados con la guerra. Aquella "forma de purificación y renovación" como la veían otrora, terminará por desvelar su peor rostro, tanto para nuestros pintores (ahora mutilados o con daños psicológicos irreparables) como para el resto de Alemania.



DER BLAUE REITER[5]

                                                                                          Kandinsky, "El jinete azul", 1903

Munich es otra capital artística alemana, se le llamaba la ciudad de los dos mil artistas puesto que ahí se congregaban creadores de todo el mundo. Probablemente el más importante fue Kandinsky, cuyas novedosas formas de abstraer y decodificar el color lo llevan a ser uno de los expresionistas más trascendentales.

Abandona la Neue Künstlevereiningung ("Nueva escuela de artistas") a pesar de ser él mismo quien la conformó para consolidar un nuevo movimiento a partir de un almanaque escrito en conjunto con Franz Marc. En éste se exponen ya teorías hacia una nueva pintura elevada.

Vemos en Kandinsky esta búsqueda perpetuamente y muy acorde a su caracter metódico[6] y culto.

En 1909 se traslada junto con Gabriele Münter a Murnau[7], donde ambos encuentran un espacio de creación y reflexión. Kandisnky continua su camino hacia una abstracción científica, relacionada principalmente con la teoría dodecafónica de Schönberg[8].

Afirmamos que Der Blue Reiter puede ser la faceta más espiritualista de expresionismo debido a las teorías que sus dos principales autores defienden. Marc habla ya sobre la conquista de los bienes espirituales y de porqué el arte místico es capaz de generar los símbolos de su tiempo "capaces de elevarse a los altares de la futura religión espiritual".

Vemos en otros autores relación con la religión (Schmidt-Rottluff y Nolde, por ejemplo), aunque en ellos ésta está representada más bien como una caída del símbolo de salvación ante la cruda realidad; por su parte Kandinsky Marc, y Macke buscan en formas que tienen a la elevación a través del color.



                Kandisnky “Composición VII”, 1913[9].



 Efectos de la guerra

Como sabemos, la guerra fueron devastadora para Europa, pero no solo en el aspecto demográfico y económico sino también en el ideológico, allí donde una vez se creyó que la guerra tendría repercusiones renovadoras, evolucionistas, allí donde la juventud alemana esperaba encontrar "un campo de flores salpicado de sangre de los héroes de guerra", allí sólo estaba la patética realidad de muertos y mutilaciones.

Fueron varios los artistas caídos en la guerra (entre ellos Marc y Macke), algunos otros sufrieron trastornos nerviosas que, si bien les permitieron abandonar el frente de batalla tuvieron repercusiones en el resto de su vida. Se dice que Kirchner tenía episodios críticos en los que desesperaba porque creía que al ser curado[10] tendría que volver al campo de batalla.
Kirchner, "Autorretrato como soldado", 1915

Por otra parte, el fin de la guerra supuso para toda la nación aceptar que lo que había manifestado el expresionismo eran aquellas características que también permitieron la guerra, por lo que el movimiento corroboró de alguna manera esta ideología. Reveló de alguna manera las mismas condiciones de vida que dieron lugar al expresionismo. Dejó en claro manifiesto la desesperación, violencia, todo aquello que la pintura ya estaba denunciando.

Para los artistas que quedaban vivos, Alemania construye un sistema de control estatal para que se sigan exhibiendo y publicando obras expresionistas por iniciativa gubernamental. Se contratan a también a los principales representantes del movimiento como docentes en escuelas de arte.

También surgen nuevos movimientos de reformas sociales y políticas en el arte. Se forma, por ejemplo el Weiderker der Kunst (comité Trabajador Pro Arte) con el objetivo de reconciliar el arte con las masas, en su tratado plasman el impacto de los eventos recientes

“Dedicado a combatientes muertos, con pesar
a todos los hermanos del planeta tierra, con amor”  
(Citado en Willet, 1970)

Novenbergruppe fue otro grupo de artistas políticamente activos que pretendía reformar las escuelas de arte y arquitectura; proponían la creación de casas de enseñanza de arte para el pueblo, la democratización de museos y la demolición de monumentos y construcciones feos, con la perspectiva utópica de reconstruir las formas metropolitanas con edificaciones a propósito estéticas y prestas para aditamentos pictóricos y escultóricos de los principales creadores de cada época.

El expresionismo funciona en esta etapa como difusor y propulsor de un socialismo incipiente, la pintura, los colores, los temas pretenden defender este deseo de la fraternidad universal, un mismo arte para todos. Con todo, existen otras escuelas que critican su irracionalidad, o tendencias como el dadaísmo y el surrealismo que le dan algo así como el golpe de gracia manifestándose como una exacerbación de algunos de sus valores.

Su última fase será la de la crítica a la República de Weimar por Otto Dix y George Grosz, pero estos, por estar más alejados de la ideología de los fundadores no serán tratados para este estudio que postula a asemejar la pintura de expresión con la danza de Bausch y Wigman.



Prefiguraciones de una danza diferente

Tenemos, pues, los fundamentos de lo que lo expresionista significa e imiplica en la plástica. Ahora bien ¿cómo se va a reflejar en la danza?

Antes de comenzar con la semblanza de los tres personajes clave hablaremos de sus cualidades en común. Para comenzar, el valor principal del movimiento es la transmisión del contenido desde dentro. La danza deberá, pues, de renunciar a ilustrar la música con el cuerpo o hacer figurar a sus intérpretes como bellas y etéreas hadas[11].

La coreografía va a dejar de partir de modelos cifrables (aun Balanchine, uno de los primeros pioneros de la danza moderno contaba con formas para anotar sus composiciones) para buscar qué puede surgir del interior del bailarín. Digamos que esta tendencia también foram parte de la voz de ese presente de Alemania. Y

Ya se dejaba ver conlos creadores de Die Brücke una nueva tendencia, las bailarinas saliendo de sus contextos. Recordemos que el estilo de vida de estos jóvenes "atraídos por la animada vida nocturna de la metrópoli" colabora en gran parte para conformar su estilo; es de este modo que logran "la expresión de la atmósfera de la ciudad". Probablemente no se habrían logrado muchas de las escenas si no estuviesen inmersos en ese sentido de "agresividad sexual e inquietud interna que se deja sentir en el dinamismo de su imagen".

Gran parte de la varieté de la que estaban nutridos era la vida nocturna alemana, la cual de alguna forma denotaba las formas más generalizadas de entretenimiento, "no se remite a la raza de los bailarines, sino a una denominación genérica de la música afroamericana y el jazz que se hacía en Berlín"[12].


                                                     Kirchner "El juicio de París", 1912


                                                           Kirchner "Variedad", 1907 



Así como las influencias principales en la pintura estaban en lo primitivo e instintivo, los creadores de danza también comenzaron a buscar en la metáfora de lo originario. La danza deja de tener como ideal la expresión estilizada y elevada y comienza a buscar su propia fuerza expresiva dentro del propio movimiento del creador, buscarla en el centro.

Pechstein y Kirchner retratan bailarinas nocturnas, Nolde introduce en Alemania el concepto de la danza africana casi ritual; en sus "Bailarinas con velas" o "Danza al rededor del becerro de oro" se aprecian otras formas de movimiento no antes vistas, desde el completo desenfado al abandono hacia el movimiento. Así vemos una profunda relación en las inquietudes de pintores y coreógrafos.

"El Gran Trastorno. El desplazamiento del centro de gravedad ... La Diversidad de fortunas, consideradas bajo el aspecto de la construcción y la composición. La necesidad de volverse con intensidad hacia la Naturaleza y de renunciar, en consecuencia a todo embellecimiento de las formas exteriores, tales son, en conjunto, los signos del Renacimiento interior... Hacer aparecer los impulsos interiores en todas las formas que provocan una reacción íntima en el espectador". Estas palabras fueron escritas por Marc pero bien pueden aplicar al trabajo de interpretación de Pina Bausch; la vuelta a la naturaleza está constantemente reflejada en la incorporación de elementos para hacer sentir de otra manera el cuerpo, la renuncia a el embellecimiento exterior está claramente demostrado en la danza de la Bruja de Wigman que muestra sin embargo el renacer de toda su fuerza interior.

  
                                                        Nolde "Bailarina", 1913



¿Cuáles son las inquietudes que mueven a los coreógrafos de la época? Si hay alguien que ilustra mejor esto (y que a la vez vincula a Wigman con Bausch) es Rudolf Laban[13]; uno de los valores fundamentales de su trabajo es que la calidad de su producción significaba en la grandeza interior de la obra (así como escribió Marc[14]).

Nolde, "Danza al rededor del becerro de oro", 1910

Podemos sugerir que en Alemania nacía la expresión subjetiva (aunque todavía con cierto apego a las formas reales), que emplea el contraste entre planos y los primeros tratados del psicoanálisis[15] para ilustrar la situación burguesa de la Alemania arruinada y en crisis posterior a la guerra, así como el pánico de la metrópolis y el mundo subterráneo. En resumen, estos son los elementos que marcan en paso del realismo social al expresionismo.

Mientras nuestros pintores sufrían las repercusiones de la guerra, Wigman explora junto con Laban en Suiza... su escuela sufriría sin embargo los bombardeos y la censura de la Segunda Guerra mundial.


Laban nace en el imperio Austro-Húngaro pero se forma en Munich y en París, dos de los principales centros artísticos, donde tiene la posibilidad de apreciar tanto la variedad de estilos creativos como la alienación del cuerpo en tanto que estaba en contacto con la vida de ciudad donde las personas trabajaban, vivían dominadas como máquinas.

  Entrada al Monte Veritas, en Suiza


En contraposición, él y otros creadores buscan en la estética de su danza una vuelta al cuerpo libre y natural. Para dicho fin funda en Suiza un centro de retiro para bailarines, el Monte Veritas; aquí se realizan al aire libre ejercicios de exploración del tiempo, espacio y peso[16]. En la ilustración tenemos por ejemplo un estudio sobre el volumen y las dimensiones espaciales dentro de un poliedro.





Laban también desarrolló el concepto de la kinosfera (el espacio al rededor de mi cuerpo, allí donde puedo estirarme y tocar), y enseñaba siempre bajo el principio de que la funcionalidad del bailarín daría su expresividad. Así funda una nueva estética basada en que la expresión como principal virtud escénica.

Veamos cómo continúan sus seguidoras este camino.



Contexto previo a la danza teatro

      
"Llevarse tan lejos como sea posible..." Wigman


Es claro que la rebelión contra las nociones convencionalmente aceptadas dentro de la política y el arte aplicó desde sus inicios (en 1910) a la danza alemana. La introspección inducida por los descubrimientos del Inconsciente de Freud fueron los principales motivadores para que a nivel internacional, figuras como Isadora Duncan y Vaslav Nijinsky tomaran parte en la búsqueda de la relación del artista con el sentimiento interno.

La danza del nuevo siglo se perfila con esta intencionalidad de introspección: “La forma es la expresión externa del significado interno… el artista puede utilizar cualquier forma que su expresión demande, es este impulso interno el que dará la pauta para la vía adecuada de comunicación” (Anderson, 1935). Las artes y el lenguaje del movimiento adquieren un sentido de mayor libertad en pos de llegar a un alcance semántico más profundo.

Wigman desarrolla un estilo único de danza a partir de su aprendizaje con Jaques-Dalcroze en Dresden (con base en la Eurítmica) y en Suiza con Rudolf von Laban, ella llama a este estilo “Nueva Danza Alemana”. El sombrío carácter que maneja marca formas corporales distorsionadas, dramáticamente intensas, un uso bastante desarrollado del gesto y del espacio (influencia de Laban) y el estudio de temas claramente introspectivos.
Uno de los elementos que más llaman la atención es que su temática se desarrolla a partir de ideas e imágenes. Hay que tomar en cuenta que para el ballet conocido hasta entonces, con base en un guión y una historia, esto era algo insólito. Otra cuestión está también en la relación con el teatro y cine expresionista de la época. Es el empleo de contraste entre luz y sombra y el dramatismo gestual lo que la refiere al teatro de Max Reinhardt[17].

El siguiente eslabón en será por Kurt Jooss. Este bailarín y coreógrafo, también formado con Laban es considerado por algunas fuentes el fundador de Tanztheater al ser de los primeros creadores en introducir el elemento dramático dentro del ballet clásico. La narrativa teatral moderna (de los años 30’s y 40’s) y la composición musical siempre paralela al proceso coreográfico fueron peculiares elementos dentro de su compañía, “Westfälische Akademie”, que más adelante se convertiría el la Compañía de “Folkwang Tanztheater”[18].

     Será el vínculo más inmediato hacia Pina Bausch. A sus 15 años, nuestra coreógrafa ingresó en su escuela en Essen (“
Folkwangschule”) y pasó a ser alumna suya y bailarina para varias de sus principales coreografías. Adoptó de su tutor una notable influencia, evidente en la investigación naturalista del movimiento y en las caracterizaciones que realiza de sus bailarines dirigiéndolos hacia temas políticos y sociales de la época.

Tras este trabajo de aprendizaje, la artista centrará su búsqueda de danza y coreografía en la expresión dramatúrgica y naturalista


Mary Wigman           
(1889-1973)
"Se viaja a través del reino de la danza con el propio cuerpo"
M. W.

Tenía dos hermanos, pertenecía a la clase media de Hannover, pasión por los idiomas y un gusto tremendo por viajar despertado en ella desde sus 17 años. Trabajó con Dalcroze en una escuela eurítmica pero la danza "sobre la música" no terminaba de satisfacerle.

Su cualidad personal de insatisfacción se tradujo durante sus primeros años como bailarina en una "infelicidad la hacía mover entre la tensión y relajación). Es gracias a un verano con en Suiza cuando tenía 24 años, que conoce a Laban; con él comienza  a explorar lo que desarrollaría como sus tendencias de movimiento.

En sus intentos por encontrar qué era formalmente danza (de la misma manera que los expresionistas hicieran con la raíz esencial de la pintura o de la música), busca axiomas armonizadores[19] en las dimensiones de movimiento propuestas por Laban.





Estudios con Laban sobre la kinosfera.

...Si dividimos al cuerpo en tres planos, exponía el último, tenemos un corte vertical (que divide mi cuerpo en izquierda y derecha), uno horizontal (que me parte en la parte superior e inferior) y por último el sagital (anterior y posterior).

Proyectando estas líneas más allá de mi cuerpo genero un espacio de interacción dentro del cual cada calidad de movimiento expresará algo distinto. De este modo, en el primer corte me encuentro con que a mayor altura, el movimiento tiende a volverse más ligero; una secuencia enfocada, por ejemplo, a las piernas será más pesado (¿qué imágenes/ sensaciones dará una hacia las rodillas, la pelvis, etc.?), vemos en su famosa Hexentanz que el hecho de baliar sentada en el suelo la obliga a una calidad expresiva de mayor intensidad en las extremidades partiendo del centro del torso. En el plano horizontal están las calidades de abierto cerrado de modo que podemos hablar de expandir y contraer del torso; y en el sagital encontramos movimientos que son sostenidos cuando avanzan o más rápidos cuando retroceden.



Utilizar este código generaba combinaciones de velocidad, tiempo y peso inusitadas en el ballet clásico (más acostumbrado a trabajar sobre el plano vertical), y esto causó revuelo en su público: al principio su danza fue rechazada completamente, pero después fue conocida y reconocida en toda Alemania como la mejor expositora de la nueva danza. Su temperamento imponía desde sur rodillas, pies, codos, caderas.

Una de las más remarcadas características en el trabajo de Wigman fue el uso de la máscara (recordemos la influencia de este símbolo tribal en Die Brücke); a partir de estas busca una transfiguración de sus personajes, a partir de convertirlos en figuras extrañas podía llegar a la transfiguración al horror.

 Nolde "Naturaleza muerta con máscaras" 1911
Nolde "Bailarina", 1920

A este respecto es fácil reconocer la relación con el expresionismo. El retorno del cuerpo a la naturaleza, el retiro casi espiritual en la búsqueda de las raíces recuerdan los espacios buscados por Kandisnky y por los veraneos de Heckel y Mueller



Kandinsy, "Murnau, paisaje de verano", 1909



Además, está claro que la exploración en su cuerpo tendrá similitud con la exploración de personaje realizada por Pina Bausch, esto yo nos induce a pensar en Kurt Joss y su escuela de danza-teatro. Veamos cómo en esta se explora la danza a través del sonido (como hizo Wigman con su tambor) y también con la palabra.


Nolde "La danza"



(1940-2009)
“Una cosa siempre fue clara para mí, no quería hacer otra cosa que estar involucrada en el teatro: ninguna otra cosa más que bailar […] Prestaba más y más atención a mi voz interior, a mi movimiento” (Bausch, 2007).

En 1940 Nació en Solignen, Alemania donde vivía con sus padres, dueños de un restaurante donde pasaba largas horas. Ella misma narra acerca de este lugar: “Era una casa verde, quizá donde comenzaron mis primeras producciones. Jugábamos al zoológico. Algunos niños tenían que ser animales, otros visitantes.”

Pina Bausch, estudiante de la escuela Folkwang.

Ya desde su trabajo bajo la tutela de Kurt Joss se topó con la necesidad de buscar en nuevas formas de lenguaje, no antes explorado y que más bien recibía rechazo incluso de los mismos bailarines. Tampoco la crítica aceptaba mucho a la compañía, decían por ejemplo“La música es hermosa, uno puede simplemente cerrar los ojos".

Con todo el empeño de Bausch continúa y  a partir de los años 70’s comienza una serie de producciones del tipo dancístico-teatral junto con su pareja Rolf Borzik. Parte de esta época son “Blaubart”, “La consagración de la primavera”, “Arien”, “Los siete pecados capitales” y “Leyenda de castidad”, todas caracterizadas por el uso de elementos anormales en escena (desde naturaleza muerta hasta los cocodrilos de “Leyenda de castidad”) resueltos logísticamente gracias a Borzik.

Dramaturgia de la coreógrafa


La relación conductual y espacial entre los bailarines es una clave para la creación e los personajes.

¿He dicho, creación de personajes? Sí. En los ballets de antaño tanto el coreógrafo daba desde el código de movimiento como el carácter del personaje, sin embargo, Pina, para sus composiciones busca generar el personaje que expresa a partir del propio intérpretes, y para esto se vale de hacer experimentar a sus bailarines distintos estímulos físicos (olores, texturas) que los lleven a un estado de percepción distinta. Estos es parte del proceso que sigue un director teatral para el montaje de una obra dramática.

 Uso de claveles en la escenografía de "Nelken"

El proyecto no había llegado a su fin y esta estrategia tuvo que cambiar. Relata: “[…] dejé de planear; no podía llegar con una frase de movimiento sin haber tenido un lugar donde empezar. Entonces hacía preguntas a mis bailarines, las mismas que me había hecho antes. Esa era la forma de trabajar originada en una necesidad… desde entonces me he involucrado en cosas sin saber a donde me llevarían”.

Ese fue un hallazgo medular. El trabajo de coreografía de Pina Bausch con cualquier compañía de danza ha sido caracterizado por el trazado a partir de este tipo de preguntas. Son sus bailarines y las reacciones que estos propongan los que conducirán a la coreografía a sus cauces definitivos. “Las preguntas están ahí para acercarnos al tema cuidadosamente. Es una forma muy abierta para trabajar, pero también una muy precisa. Me lleva a muchas cosas que seguramente no habría logrado idear por mi cuenta”. (Bausch, 2007). La ventaja de la danza teatro es que puede conducir a resultados acerca del ser (tanto el intérprete, creador y observador) a través de las investigaciones en movimiento, puesto que conjuga las formas de comunicación del cuerpo y el análisis psicológico propio de la dramaturgia.
                         

 Uno de los elementos más exuberantes introducidos en escena por Bausch, el hipopótamo en “Arien”.


EL PRIMER ELEMENTO CLAVE: LA BÚSQUEDA DEL YO

Como mencioné en el apartado anterior, el trabajo escenográfico en la obra de Pina Bausch se vio enormemente enriquecido con el apoyo de Rolf Borzik. “Fue el primer diseñador en llevar naturaleza al escenario –desde maleza para Come Tanz mit mir hasta agua para Arien. Para Bausch, parte de la creación escénica era el juego con las posibilidades; a fin de cuentas, el teatro posee la magia de concretar lo que uno no puede hacer en la vida normal, y es mediante estos recursos que logró llevar la estética de sus coreografías hacia sitios  inexplorados de belleza y fantasía.

“Algunas veces sólo podemos aclarar algunas inquietudes confrontándonos con nosotros mismos, con lo que no sabemos”. Así, los bailarines de Bausch se encontraban resolviendo todo el tiempo distintas clases de preguntas, desde como realizar en movimiento la sensación de despedida a como lidiar con la humedad y la tierra pegada en los pies. Encontramos aquí un elemento de la composición expresionista: la necesidad de resolver inquietudes ontológicas como germen.

CONFIGURACIÓN DEL LENGUAJE

El trabajo de Pina Bausch no era del tipo psicodramático puesto que no se valía de un guión, en lugar de ello, su intención era la expresión a través de manifestaciones poéticas del movimiento.

Aún así, una aproximación psicológica es similar a la de las técnicas de teatro, éstas, relacionadas con la elaboración de un caractere a partir del lenguaje mientras que las de nuestra autora  de creación buscando un lenguaje de movimiento a través del carácter/sensaciones/emociones a expresar. Esta estrategia es pionera entre los coreógrafos de su época aunque ahora es pilar de la creación en el arte escénico.

PARTICIPACIÓN DEL ESPECTADOR

Veíamos cómo esta fue una cualidad acuñada en la pintura de Kandinsky, quien al abstraer cada vez más su pintura demandaba del espectador involucrar experiencia y contexto con la pieza. Posteriormente,  situación se convertiría en una cualidad del arte contemporáneo, pero de vuelta a los años 70’s, Bausch significó una revolución con ese estilo severo, nunca cómodo de asimilar que enfrentaba al público a horas seguidas de información. Su trabajo produjo al inicio una profunda desaprobación por parte de su público, acostumbrado a otra estética de danza, y a la fecha continúa ocasionando polémica entre críticos de arte[20].

Bausch plasma situaciones importantes de la existencia del hombre en su trabajo[21], lo que repercute en un producto denso: la escasez de momentos ligeros en su obra apela a la forma a su forma de abordar este compromiso social y por tanto, su metodología no estaba dirigida para complacer al público  “No estamos aquí para satisfacer, no podemos dejar de retar al espectador” (citado en su biografía por CPN); esa fue la revolución del Tanztheater.


Uno de los componentes fundamentales de la poética de Bausch, y que también la vincula inminentemente con el expresionismo fue el uso del símbolo. Como pilar fundamental para lograr ese carácter ultraterreno que transporta al espectador a estados fantásticos, utiliza una nutrida variedad de imágenes hilvanadas en un proyecto visual. La búsqueda de estos símbolos forma parte del resultado de las preguntas a las que enfrentaba a sus bailarines. Si como creador solicitaba “haz de esto algo pequeño” o “dame el gesto de desasosiego” era con tal de encontrar en el movimiento elementos que apelaran al inconsciente del espectador para poder integrarlos a un juego de imágenes compuestas por el vestuario, escenografía, distribuciones en el espacio y evidentemente movimiento.

Hace un momento hablábamos del enfrentamiento del público con las mismas interrogantes de la coreografía. El símbolo se añade a esta característica planteándose con una pregunta difícil de evadir: “¿Cómo nos escuchamos?[22] En la observación y asimilación de los mensajes cifrados al inconsciente puede yacer la respuesta a esta interrogante si se logra abstraer la danza conservando en su trasfondo una realidad que pueda ser rescatada por el espectador avezado.

A decir verdad, es tal la cantidad de elementos que apelan directamente a los lugares lúgubres del inconsciente del público, y tan complejo el formato en que son presentados que casi parece que se busca un conflicto directo con el espectador, quizás una “aproximación a su interior incitada por la coreografía” (Staehler, 2009, p. 3).

Con Bausch, los temas de todos los días son expuestos ante la audiencia como una condición de fenómenos que conforman el marco poético de su obra. Encontramos infinidad de escenas con alto contenido lírico: bailarines en cuatro puntos en Danzón, el hombre que se baña con una esponja en Fensterputzer, bailarines que juegan y cantan como niños durante Come Tanz Mit Mir, el personajes peinando amorosamente a su compañera o  la pareja que se abraza en una silla debajo de la cual hay dinamita en Nur Du…¿Cómo nos sentiríamos orgánicamente al ver a un grupo de bailarinas danzando dentro de un tanque de agua que les llega hasta el cuello[23]? (Arien). Estas escenas provocan, por extraño que parezca, distintas reacciones fisiológicas en el espectador, lo que convierte al símbolo en parte vital del lenguaje de la artista.

EL HUMANO ES PARTE DEL UNIVERSO, NO SU CENTRO

Hemos visto previamente cómo el artista expresionista buscaba dentro de sí y sus propios misterios antes de comenzar con un proyecto artístico y cómo Bausch aplicó este principio en su método de creación coreográfica en base del planteamiento de interrogantes.

En este proceso, el cuerpo se transforma en algo más que en un medio de expresión de ideas, “el cuerpo está en cambio constante, ligado a los elementos naturales, exhibiendo su vulnerabilidad” (Staheler, 2009) y por lo tanto está sometido a las leyes y procesos de su medio. Así surge una forma de re-valorización del humano, como parte de una unidad mayor, y se devela la necesidad que tiene de integrarse a su medio. En el bailarín, el cuerpo se convertirá en una puerta, en el método más directo y eficaz para encontrar verdades antropológicas.

Por estos motivos el trabajo de Bausch era altamente demandante, esperaba de sus bailarines el compromiso de ser investigadores de movimiento[24]. En general, la composición de su movimiento se veía reducida a pequeños gestos o escenas específicas que, entre menores y más concretos, funcionaban mejor para ser desarrolladas pero que así mismo requerían de la participación honesta y humilde de los intérpretes para poder ser integrarla en el contexto total de la obra. La repetición, no hasta la belleza sino hasta un grado de verdad en el intérprete.

RELACIÓN CON EL TEATRO

Hemos dicho que Pina buscaba la verdad. Cada una de sus coreografías, igual que las piezas de teatro de Reinhardt[25] era un vehículo. “El arte es un medio de desarrollo mental y moral” (Huntly, 1993, p. 55). Para el creador escénico la exploración radicaba en sacar a las piezas de su intimidad para elevarlas a un paradigma mayor, hacer del arte “un instrumento para recibir y transmitir el espíritu del drama” (Huntly, 1993, p. 2).

Si tuviésemos la oportunidad de analizar la poética Aristotélica en este tratado veríamos que el teatro aspira a este mismo fin. Es él que hace comulgar a coreógrafos y directores, ambos gremios se valen del poder de elementos atemporales (lo primitivo, lo religioso, el espíritu dramático, el inconsciente) y buscan la expresión a través de ellos.



Estudio de la obra de Pina a través de sus tres coreografías maestras


“Para expresar lo que estaba verdaderamente en mi corazón me era imposible utilizar el material y los movimientos de otros. Simplemente por respeto. Lo que ya había visto se convirtió en tabú para mí. Me puse entonces en una difícil situación: ¿cómo y porque podría expresar algo por mi cuenta?” (Bausch, 2007).

Frühlingsopfer (La Consagración de la primavera)

“La Consagración de al Primavera” fue considerada una de las obras más importantes de Pina Bausch, fue una de sus primeras grandes realizaciones y, entre las que se analizarán en este documento, la que contiene menor cantidad de elementos de la danza teatro puesto que el lenguaje de esta coreografía todavía tiende al ballet postmoderno, sin que esto reste su valor lírico.
Con música de Igor Stravinsky Bausch realiza una mezcla de ferocidad con respecto a la muerte y la devoción de los participantes de la danza. El principal enfoque de desarrollo en la coreografía es la excitación a la que se ven sometidos todos los participantes, ésta es llevada al arrebato con el solo final de la elegida[26] en su danza previa a la muerte.
La forma en que Bausch desarrolla su versión de la consagración está hecha a base del horror del sacrificio; los personajes son sometidos a una fuerza salvaje y brutal capaz de controlar su vida. No podríamos decir que Bausch tuvo, como hubiese sido el caso del teatro, un guión fijo para la elaboración de esta pieza, pero notamos cómo la idea principal (la mujer que baila hasta morir) está íntimamente arraigada en ella antes de comenzar a componer.
Desarrollar los personajes requería de un nuevo paradigma para el concepto de mover. Hubo de remodelar su cuerpo con una técnica a la que no estaba acostumbrada, descubrir nuevos dolores. “Algunos de los movimientos podían tomar horas, repetidos hasta cincuenta veces hasta que estaba bien, hasta que nuestros cuerpos se convertían en la memoria de los movimientos.”
Hablando de la concepción de esta coreografía en una entrevista realizada por el periódico NY Times, la coreógrafa menciona: “Lo primero que hice fue hablarles [a los intérpretes] acerca de lo que la palabra Sagrado significa para mí[…] Hay tantos sentimientos en este concepto, cambia constantemente. Hay también mucho miedo. Pensé entonces, ¿cómo sería bailar sabiendo que morirás? ¿Cómo sentirías? […] Los bailarines me escuchaban con los oídos atentos…”
El resultado fue una proyección de formas salvajemente intensas dominada por un grupo de bailarines capaces de proyectar la intensidad que amerita tan tremenda historia.

RELACIÓN CON EL EXPRESIONISMO
Si bien Frühlingsopfer no representa una distorsión considerable del cuerpo está construida en base a una angulosidad do movimientos. Creo en que Bausch ya comienza aquí a alejarse de las secuencias gratuitamente complicadas y busca más bien en la intensidad y dinámica del cuerpo.

Ballet-teatro Wuppertal en “Das Frühlingsopfer” Representación del 2003[27].




“Café Müller” es una composición para seis personajes, coreografiada y bailada por primera vez en 1978 con arias de “Dido & Aeneas” y “The Fairy Queen” de Henry Purcell, se ha convertido un ícono de del trabajo de Pina Bausch dado su lirismo y el hecho de que es la única pieza de la Compañía en que la coreógrafa participa bailando.

Sin valerse de un guión específico, Pina Bausch representa un drama de la vida cotidiana con esta historia de alineación y soledad.

Recordemos que, cuando niña, nuestra artista vivía en medio del ambiente urbano de Solignen, donde sus padres poseían y administraban un restaurante. Cuando ella tenía doce años, debido a una enfermedad de su padre, tuvo que quedarse a cargo del negocio por dos semanas: “Tenía que servir las cervezas y cuidar a los clientes. Aprendí mucho haciéndolo. Era muy importante para mí y muy satisfactorio. En cualquier caso no hubiese cambiado esa experiencia por nada.” (Bausch, 2007)

La costumbre por la observación germinó en Bausch desde pequeña, podríamos decir tuvo un interés especial con respecto a las relaciones que se daban entre los clientes del local y por fortuna, las circunstancias le dieron el marco perfecto para satisfacer su curiosidad: “solía esconderme bajo las mesas y simplemente quedarme ahí. Encontraba muy emocionante lo que veía: amistades, amores, peleas -todo lo que puedes experimentar en un restaurante local como este. Creo que eso estimuló mi imaginación bastante” (ibid.)

La idea principal gira en torno la relación inarmónica entre un par de personas. Si bien existen varios personajes, los cuatro restantes tienden a apoyar la situación principal, incluso a veces parecen ser proyección de la pareja. La obra, entonces, gira en torno a lo que sucede entre ambos; el su conflicto que observamos lleva a la coreografía a un estado de melancolía y desesperación.

Para darnos una pista de las cuestiones tratadas por la autora, nos acercaremos al texto cantado en la primer Aria de la obra, La parte de Juno en el Acto V de “The Fairy Queen”. He aquí una traducción del libreto original.

Amantes tres veces felices, pueden ustedes ser
por siempre, por siempre libres
de ese tormentoso Diablo celoso.
De todo ese ansioso Cuidado y Lucha
Que tiene que ver con la vida matrimonial;
Sea el uno al otro verdadero,
Amable con ella así como ella contigo,
Y  dado que los errores de esta Noche pasaron,
Sea el siempre Constante, por siempre ella Castigada.
Oh, déjame llorar, por siempre llorar,
Mis ojos jamás volverán a dar bienvenida al Sueño;
Me esconderé de la vista del Día,
Y suspiraré, y suspiraré lejos mi Alma.

Se ha ido, se ha ido, deplorable su pérdida;
Y yo nunca lo veré de nuevo[30].

El desarrollo de la obra parece sustentar y ser sustentado por esas líneas.
Desde este enfoque, tenemos la lectura de un triángulo amoroso desde el punto de vista subjetivo de la mujer decepcionada. Nos topamos, pues con una cuestión interesante, la idea no versa sobre la situación como tal, si no sobre la repercusión emocional que tiene en la protagonista. La historia surge desde la interpretación inconsciente que ella da de su situación, entonces, el hecho de que la coreografía se desarrolle dentro de su sueño es la construcción dramática de la artista para adentrarnos en este paradigma. El hecho es genial: leemos situación a partir de la exploración en la psique del personaje. El tema entonces, es la angustia vivida por esta mujer más que lo que la hace vivirla.

ENFOQUE SINTÁCTICO

Como dijimos, la pieza está construida con tres mujeres y tres hombres.
Dos de ellas visten un camisón de dormir, caminan con los ojos cerrados y brazos extendidos; una de ellas podría ser la protagonista; la segunda, un enfoque más alejado de la situación real, el inconsciente que siempre ronda la escena, sus acciones dentro de la obra funcionan para hacer notar la agonía que esta sufriendo la principal. La tercer bailarina usa un vestido azul, un abrigo negro, tacones rosados y una peluca roja (el máximo colorido de la escena), ella deambula en el escenario como si no perteneciera ahí; más adelante podremos intuir lo que está buscando en su andar. Este es el personaje más enigmático, juega un rol de oposición entre la pareja pero está sumida siempre en la confusión e indecisión, sus trazos en el escenario son inciertos, parece no saber hacia donde caminar salvo cuando se trata de seguir al varón.

Este hombre tiene el papel protagónico, usa camisa y pantalón, en repetidas ocasiones interactúa con nuestra protagonista; otros dos hombres, vestidos con traje, manipulan el espacio. Uno de ellos cruza desenfrenadamente entre las sillas dispuestas en todo el espacio, apartándolas para que los dos miembros de la pareja puedan pasar y realizar sus intervenciones libremente[31], el otro se relaciona y manipula a los protagonistas (es quien coloca a la protagonista en los brazos de su pareja y de algún modo interfiere en las acciones que suceden entre ellos).

El escenario está lleno de mobiliario de restaurante, durante la mayor parte de la pieza los bailarines entran y salen mientras Bausch (una de las dos sonámbulas) permanece topándose contra la pared.

Dada la presentación de las dos primeras mujeres (entran a tientas a un espacio desolado con una ambientación nocturna), podemos inferir que todo está ocurriendo en sus sueños. La posibilidad dramatúrgica que esto implica es de maximizar las emociones (como ocurre en los sueños) y utilizar imágenes subjetivas para transportarnos al interior del personaje; además, la repetición de las acciones de estas dos mujeres nos hace pensar en un tiempo que, si bien lógico, no está del todo apegado a la realidad.

A partir de este hecho podemos diferenciar a los personajes que actúan en escena; están los que participan conscientemente y el par de mujeres en camisón que parecen estar habitando el espacio desde un plano onírico.

Un recurso que apoya la ambientación de una manera evidente es la escenografía, las sillas que llenan el espacio y las cuatro puertas que se disponen como entradas remontan al espectador inmediatamente al lugar donde se lleva a cabo la acción. Sin embargo el moblaje parece excesivo y en algunos momentos, ilógico, lo que refleja, por otro lado, la distorsión de las imágenes reales en los sueños.
Si buscamos en los personajes a través de la impresión objetiva que da su movimiento corremos el riesgo de omitir la mayor parte del significado sustancial. La cuestión radica en dejarnos llevar por las imágenes y la intensidad que reflejan, aunque muchas veces esto no resulta suficiente para tener una comprensión total de la pieza.Las coreografías de Pina Bausch implican la correlación de muchos elementos que tienen algo nuevo que comunicar cada vez que nos enfrentamos a ellas. Se recomienda abrirse a recibir las sensaciones antes de intentar decodificarlas; éstas por si mismas transmiten un alto contenido emocional, la posterior interpretación de las situaciones será relativa al espectador.

RELACIÓN CON EL EXPRESIONISMO

Creo que esta es la primera de la Compañía de Wuppertal que manifiesta un elevado contenido expresionista. El uso lleno y desordenado del espacio nos recuerda a algunas pinturas metropolitanas previas a la guerra. Además de su alcance emocional, la pieza tiene cierta semblanza del grito desesperado imperante en este estilo. La angustia expresada por la protagonista puede relacionarse fácilmente con la pintura de Munch[32].

Más aún, la investigación en torno al movimiento corresponde a la necesidad de un lenguaje distinto de danza. La pieza no habría logrado su alcance con una poética distinta puesto que probablemente la analogía de este sueño pesadilla no podría haberse dado de otra forma que a través de la sinceridad que representa este preciso discurso dancístico.

Igual que los autores expresionistas, Bausch se vale de la distorsión de la imagen[33] para introducirnos en el ambiente nocturno, así mismo la angustia es típicamente referente a este movimiento artístico, así como la angulosidad en las formas, los golpes y algunas secuencias un tanto fragmentadas.


RELACIÓN CON EL TEATRO

Mucho más evidente es el manejo de elementos teatrales. Desde su interacción con los elementos del espacio, los personajes actúan con un sentido íntimamente relacionado a la conformación de una producción teatral. La disposición del escenario es un recurso en el que se aprecia esto especialmente; se llena el espacio con mobiliario que es utilizado tanto convencionalmente (personajes apoyándose en las sillas y mesas), como símbolo de un terreno a veces familiar, a veces estorboso para los personajes.

La interacción que se da entre éstos también tiene una secuencia lógica y coherente que soporta el tema. Tenemos los agresivos encuentros de la pareja (los abrazos efusivos, ella cayendo de su brazos, avanzar cargándose mutuamente, azotarse en la pared), los dos hombres que manipulan a estos personajes (uno corre liberando el paso y otro suele cargarlos como piezas móviles dentro de un juego de objetos), las dos mujeres que transfigurando su cuerpo en representación de distintas variaciones de angustia a ciegas y por último las funciones de la mujer de peluca en quien evidentemente recae el conflicto amoroso).

Percibimos dentro de estos encuentros que cada uno de los personajes está dotado de un carácter específico, por lo que los tipos de contacto generan situaciones específicas que enmarcan la trama. Aún cuando se prescinde de la palabra durante los mencionados acercamientos, las cualidades de distintos caracteres otorgan un claro enfoque teatral.

Hablábamos de la carencia de un guión como guía. No queremos decir con esto que la obra carezca de argumento o de dramaturgia (con guión nos referimos tan solo al boceto marcado con la palabra hablada), todo lo contrario; casi podría decirse que las acciones físicas están determinadas por la descripción de los sucesos de un sueño y esto implica la organización a través de una pauta lógica de actividades específicas progresivas que desemboquen en una acción conclusiva.

Siempre referido al tema principal, todas las acciones que vemos en escena giran en torno a la inquietud de la protagonista. El encuentro con su pareja, su eventual soledad y el momento en que se reúnen él y la mujer de peluca roja son progresiones fantásticas de su angustia. Además, el hecho de que las acciones del resto de los personajes respalden lo que sucede con ella habla de un discurso dramático en tercera persona.

La acción física clara y explicativa es el recurso perfecto para que entendamos qué pasa con la historia y quede fijado el contexto en que todo toma lugar. Esta es la enorme intervención del teatro para la estructuración de Café Müller.

Fotografía de una representación Café Müller en el 2009. Fotografía de Merakimi Giderdi[35] 

                                                                                    
             Heckel, El manicomio




 APENDICES

Qué es la danza teatro.

 
                                                  Munch "La danza de la vida", 1900


Lo que entendemos por teatro es la manifestación de lo natural llevado a escena en una transfiguración a lo ficticio; mantener clara la relación de estos dos componentes ante la interpretación del público, su sintaxis se vale de elementos de fácil asimilación como la palabra y la relación directa y cotidiana con el objeto.

Cuando la danza (que por naturaleza tiende a ser más abstracta) se vale de estos mecanismos para transmitir su comunicado de una forma más contundente y fuera de ambigüedad, estamos ante lo que conocemos como danza teatro. Ésta se dará cuando se conjuguen para la dramaturgia escénica elementos sintácticos y lenguaje propio de ambas disciplinas.

Así, la danza, realizará el manejo específico y especializado del cuerpo y la comunicación a través de formas en el espacio sin dejar de ser apoyada por elementos en teatrales (espacio escenográfico, relación con objeto, representación de acciones cotidianas y expresión vocal) para brindar una locución de significado mas esclarecido.



 Relación que de la obra de Pina Bausch con el expresionismo.


Creo que la primer y más importante influencia que tiene el expresionismo en la danza de Bausch es la búsqueda de un lenguaje que esté de acuerdo con nuevas necesidades de expresión.

El hecho de que la coreógrafa investigue en las sensaciones y los caracteres del movimiento denota una necesidad de locución apoyada en aspectos más profundos que la creación de la obra, esto es, la búsqueda de una comprensión ontológica. Vimos anteriormente que artista expresionista fundamentaba su obra en la necesidad de explicarse a sí mismo como parte de un mundo caótico; es pues, la inquietud de reconocimiento el principal motor de creación, en lugar de la estética de un producto terminado.

Otro factor a remarcar es que Bausch se aparta a priori de las secuencias gratuitamente complicadas, investigando más bien en la intensidad y dinámica del cuerpo. De este modo, la complejidad del movimiento, de existir, se da como resultado y no es el objetivo dentro la creación coreográfica.

El uso del discurso de desesperación, la distorsión de la imagen y la angulosidad de formas en el espacio también son típicamente referentes al expresionismo.



Movimiento físico, agilidad espiritual, flexibilidad mental, desarrollado por Wigman, ¿qué tiene que ver con la ideología pictórica?

Los productos cualitativos de esta investigación están relacionados al conocimiento del concepto Expresionismo dentro de las artes alemanas. Como se comentó previamente, este fenómeno está determinado por la reproducción o imitación del entorno según las sensaciones provocadas en nosotros por impresiones externas; esta cualidad particular tiende a distorsionar la realidad puesto que no toma en consideración las propiedades objetivas de las mismas.

Por su lado, analizamos como la danza-teatro surge tras un proceso de búsqueda de un lenguaje más nutrido dentro de las artes y cómo repercute su aplicación en el fenómeno escénico percibido por el espectador.

Este estudio es el que nutre el enfoque cualitativo de mi investigación, puesto que a partir de los criterios simbolistas y radicales del expresionismo y el análisis de sus elementos de dramaturgia es que se pueden comprender muchas de las técnicas de creación coreográfica de Pina Bausch.

Dentro del este artículo nos hemos percatado de ligeras y ambiguas distinciones entre la danza y el teatro, en tanto el que el lenguaje corporal sustenta a la primera mientras que el teatro está apoyado en el discurso hablado. Estos preceptos, si bien no rígidos, dibujan una distinción a primera vista entre estas dos artes.

La cuestión de nuestro interés se da a partir del arte postmoderno, caracterizado por ensanchar (hasta casi eliminar) las fronteras entre disciplinas. Es esta la causa por la que la breve brecha entre danza y teatro quedara reducida a nada cuando artistas con nuevas propuestas integren entre sí sus elementos básicos.

Parte del alcance del movimiento posmodernista implicó que muchas artes encontraran en su lenguaje elementos cada vez más abstractos, mismos que hicieron a sus cánones difuminarse en un mar de posibilidades.
Dentro de uno de los tratados de dramaturgia más reconocidos (nos referimos a la Poética Aristotélica) se delinean los principios del determinismo específico entre las disciplinas, sin embargo, esta delimitación es claramente el preludio de una integración.

Puesto que el color y la forma se usan como medios por quienes (bien por el arte o la práctica constante) imitan y dibujan diversos objetos mediante su ayuda, y la voz  es empleada por otros, así también en el grupo de artes mencionado, los medios para ellos son, en general, el lenguaje y la armonía, empleados bien simplemente o en determinadas combinaciones.
Una combinación de sólo armonía y ritmo es el medio adecuado en el arte de tocar la flauta y la lira y otras artes que responden a la misma descripción, por ejemplo la siringa imitativa. El ritmo solo, sin la armonía, es el recurso en las imitaciones del bailarín; pues aun éste, mediante el ritmo de sus actitudes puede representar los caracteres de los hombres, así corno también lo que ellos hacen y sufren. Hay, además, un arte que imita sólo a través del lenguaje, sin armonía, en prosa o en verso, ya en uno o en pluralidad de metros.

Aristóteles. (1979). “El arte poética”, trad. de J. Goya y Muniain.


A pesar de que se propone ya un “lenguaje y la armonía, empleados en determinadas combinaciones”, habrían de ser necesarios siglos de desarrollo específico dentro de cada ramo del arte para permitírsele a sus derivaciones la conjugación en un objetivo común: La mímesis.
 “Cuando un artista necesita una forma de expresión en la que lo convencional de su arte lo limita; busca movimientos o sonidos nuevos para completar su discurso. [En el teatro] comenzó a combinarse lo cotidiano con lenguaje inventado, silencios largos, etc.”[39]
Una vez dibujado el camino hacia estas formas de enriquecimiento de la expresión distintos representantes del arte escénico encontraron valiosos recursos en los que podían apoyarse. El teatro señala espacios específicos que circunscriben las acciones a planos determinados, dando orden en el desarrollo de las acciones (nuevamente nos encontramos que la suma de las dos disciplinas dará como resultado una estructurar mas clara del nivel de acción). Así mismo, el coreógrafo que lo necesite puede apoyarse por otras posibilidades del cuerpo como el uso de la palabra o las acciones cotidianas, o en la relación con el exterior en el caso de la relación con objetos cotidianos (utilería) y relación de personajes en escena.


Notamos evidentes beneficios de la integración, con todo es imprescindibles que funcionan cuando provienen de la necesidad de expresión “La sinceridad hace trascender fronteras artísticas”[40], de otro modo, si se trata de la implementación gratuita de cualquier elemento estamos cayendo en un vacío artístico.

Riesgos


La difusión que percibimos en las definiciones de teatro, danza y música tiene como hemos venido insistiendo funciones de integración pero también genera la posibilidad de una disolución de la calidad.

Y esto es sustentado por los siglos de especialización que sufrió el arte; de no ser por los distintos momentos históricos que llevaron a varias disciplinas a encontrar sus formas máximas de expresión no tendríamos los antecedentes cualitativos tan valiosos que conforman la totalidad del lenguaje artísticos que hace distinguir la conciencia que el humano tiene sobre su entorno y la capacidad de sintetizarlo.

Por otro lado, cuando se comienza a investigar en la indeterminación de las técnicas de creación artística vemos surgir también formas de imitación o collage sin sustento, se rompe la lógica sin un objetivo, se abusa del absurdo, etc.

Generar formas nuevas de expresión implica hallarse ante una clase distinta de significados y de necesidades de mimesis; si se imita sin necesidad de llegar a esos hallazgos, esto es, si pretende llegar a las mismas formas sin atravesar el proceso, el artista no estará más que redundando con balbuceos en la expresión acuñada por otros.

Esto también podemos observarlo en las palabras de Aristóteles
Es verdad que la gente agrega la palabra poeta al nombre de un metro y habla de poetas elegíacos y poetas épicos, y piensa que se los llama poetas no en razón (15) de la índole imitativa de su trabajo, sino de manera indiscriminada a causa del metro en que escriben. Aun si una teoría médica o de filosofía física se expresara en forma métrica, sería común designar al autor de este modo.
Aristóteles. (1979). “El arte poética”, trad. de J. Goya y Muniain.

Recordemos los principios que gestan el arte: un imitador ante una realidad que intentará interpretar a través de su mimesis y será transmitida a una tercera persona. El fundamento reside en el objetivo interpretativo, no en el colorido del lenguaje resultante.


Sugerencias

A partir de este documento se ha intentado demostrar la vigencia y validez de la relación entre las distintas disciplinas artísticas en pos de una mejor expresión del discurso.

Uno de los problemas mayores con los que se ha enfrentado la danza moderna es el hecho de que no está edificada sobre ninguna forma concreta, escrita, estimable. Lo que la convierte probablemente en la más subjetiva, efímera y abstracta de las artes.

A través del estudio del trabajo de Pina Bausch se observan distintas posibilidades para fortalecer la claridad de transmisión del mensaje sin perder el sentido mágico que aporta a la escena la aplicación de la estética de un bailarín en pleno dominio de su cuerpo.





[1] Una crítica cínica, ácida
[2] Los fundadores Ernst Ludwing Kirchner, Erich Heckel, Karl Schmidt-Rottluff y Fritz Bleyl, los tres primeros ilustrados en "Grupo de Artistas" de Kirchenr, el cuarto, Otto Mueller figura sentado. Así como Mueller otros artistas se integraron al grupo hasta su disolución durante la guerra.
[3] Cita del Manifiesto de Die Brücke. Figura
[4] Ver mapa
[5] En el anexo Der Blaue Reiter puede encontrarse el contenido preciso de la primera de este documento.
[6] Habiendo estudiado derecho **
[7] Ver mapa
[8] Frecuentemente utilizaba términos musicales asociados a su trabajo relacionando conceptos pictóricos con musicales en su composición. Su pintura, decía, afecta al espectador a través del carácter que tiene el color.

[9] Kandinsy pone en manifiesto su capacidad para la organización armónica de formas y colores así como el discurso que puede generarse a partir de los matices e intensidades. Se distinguen motivos alusivos al sonido en esta pieza.

[10] Internado como estaba en un sanatorio* en **. Muere suicidándose (la figura anterior es un retrato de él mismo con la mano mutilada.
[11] Aunque es verdad que figuras como Pavlova(1) siguen interpretando con fuerza en Rusia, aparecen Isadora Duncan(2) y Ruth St Denis(3) vislumbrando nuevas formas de mostrarse en el escenario.

                     
[12] Dahlmanns, Janina, "Por el espectáculo como ritual. Citado por
[13] Wigman se formó con él directamente en Monte Veritas (por recomendación de Nolde) y Bausch fue alumna de su discípulo Kurt Joss en Essen
[14] "Estoy empezando a ver más y más detrás, o mejor dicho, a través de las cosas, a ver detrás de ellas algo que ellas esconden sutilmente en su mayor parte, con su apariencia exterior que engaña al hombre, pues es una fachada bastante diferente de lo que en realidad encubre" Marc, diario, Navidad de 1914, en Thoene, Modern German Art (Harmondsworth, Inglaterra, 1978, pp. 66-67).
[15] Pabst incluso se valió de a un par de los discípulos de Sigmund Freud para apoyar su trabajo en el tema de la impotencia.
[16] Veremos más adelante este trabajo desarrollado, sobre todo la interacción con el espacio.
[17] Actor y director de teatro y cine (Austria, 1873- EUA, 1943).
[18] De la que Bausch será directora a partir de 1969.
[19] Algo como la estructura duodécimal en la música de Shönbert o la teoría del color desarrollada por Kandisnky.
[20] Algunos críticos niegan las técnicas de implicación del público en la danza como una forma de abierta y aceptada de arte. “Las ideas de la danza teatro son la conexión entre el ejecutante y la audiencia. No es una obra de arte auto sustentada porque, para desarrollarse completamente requiere de un espectador activo. La llave está en la audiencia, a quienes se les pregunta acerca de sus experiencias de todos los días” (Janani, 2009, p. 32)
[21] Encontramos que su temática gira en torno a las relaciones sociales, interacción de pareja y a la exploración en torno a distintas culturas; en suma, al comportamiento del hombre en distintas circunstancias sociales.
[22] Se atribuye esta cita a Ernst Block, compositor suizo-americano del siglo pasado.
[23] Este gesto que se refiere a la expresión de “estar con el agua hasta el  cuello”.
[24] Dominique Mercy relata en una entrevista para The NY Times: “Algunas cosas eran difíciles porque eran simples. El bailarín debe ser abierto, fácil de leer, desnudo ante el público y este trabajo está mas allá de lo cotidiano”. Otra de sus bailarinas habla sobre el detalle que pone la coreógrafa en el movimiento: “cada uno era trabajado hasta el más mínimo detalle. Seguía puliéndolo hasta que verlo correcto, solo entonces te dejaba en libertad”.
[25] Director austriaco de cine y teatro. Vinculado con el expresionismo
[26] Para distinguir a este personaje se utiliza un vestido rojo, mismo que será objeto protagónico en toda la pieza. Aquí volvemos al contraste de color, recurso utilizado repetidamente en el expresionismo.

[30] Extraído del libreto de “The Fairy Queen” referido por Eric Maldague.
[31]Esta acción podría representar algunas funciones anómalas dentro del sueño. Cuando soñamos es frecuente que vivamos situaciones ilógicas como ésta, en la que la falta de interacción con el espacio físico es una ley física normal, además, dota a la escena con un sutil toque de irrealidad.
[32]  Existe una obra de Munch en especial que plasma en estilo similar de desolación, se trata de “Madre muerta  y niño” pintada en 1897 (aunque previa al periodo de auge expresionismo pictórico se sustenta en las mismas cualidades emocionales.
[33] Se refiere la autora al desorden reinante en la habitación, la aparente disparidad de los personajes y la estructura confusa de los desplazamientos de los mismos.
[37] Encontramos las acciones agresivas siempre repetidas por todos los duplos: en un momento, todos están pegados a la pared y son literalmente arrancados de ella por sus parejas.
[38] Todas las fotografías fueron extraídas de la página web
[39] Zapata, Martín, entrevista personal, 24 de noviembre de 2010.
[40] Zapata, Martín, entrevista personal, 24 de noviembre de 2010.

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